Distinción "Buena Práctica en Participación Ciudadana" 2023
17 Edición
El presupuesto rural participativo en el municipio de Uppsala, Suecia, comenzó en 2017. Muchos residentes sintieron que el campo se pasaba por alto en relación con la ciudad de Uppsala y sentían que el municipio estaba distante.
El piloto de presupuesto participativo fue inicialmente por cinco años, pero el ayuntamiento lo hizo permanente en 2021.
El presupuesto participativo en áreas rurales permite que la municipalidad trabaje directamente con los residentes rurales y les dé una voz real sobre cómo se gasta el dinero en sus comunidades.
Durante cinco años, el proceso distribuirá alrededor de 3 millones de coronas suecas, genera compromiso en las comunidades locales y demuestra que todas las partes del municipio son importantes. Dado que es un proceso recurrente, permite una perspectiva y previsibilidad a largo plazo.
Permite que el municipio responda a las iniciativas locales, crea nuevos foros de cooperación y también asegura la visibilidad municipal en las distintas partes del municipio.
El área rural de Uppsala se ha dividido en cinco subáreas, cada una de las cuales es el foco durante un año del proceso.
El proceso incluye los siguientes pasos:
- Movilizar a los residentes y formar un grupo de trabajo local
- El grupo de trabajo local decide los principios para el proceso
- Recopilación de ideas de los ciudadanos.
- Verificación de ideas implementables, incluidas cuestiones legales y presupuestarias.
- Votación
- Implementación de las ideas ganadoras.
Lo que distingue a este proceso es:
Enfoque geográfico. Este proceso se enfoca exclusivamente en las áreas rurales y busca superar el sentido de brecha urbano-rural.
Escalado a la población. Los recursos que se asignan a cada área se basan en una suma per cápita de 60 SEK. Esto crea una distribución más equitativa que una cantidad fija.
Adaptabilidad local. Un componente clave del presupuesto participativo de Uppsala es el grupo de trabajo local, parte del cual es nominado y elegido localmente, y que establece las reglas y el formato para el presupuesto participativo en cada área.
En cada área el grupo de trabajo local ha dado forma al formato y proceso del presupuesto participativo. Fueron ellos quienes decidieron cómo comunicar el proceso, cuánto dinero se podía gastar por proyecto, quién podía votar y qué tipo de proyectos serían elegibles.
Durante los últimos cuatro años, el presupuesto participativo ha financiado 15 proyectos, incluida una cancha de voleibol de playa, varios gimnasios al aire libre, un desfibrilador y la limpieza del río local.
La votación se llevó a cabo principalmente a través de uppsala.se, pero los grupos de trabajo locales también organizaron eventos de votación cara a cara, que fueron especialmente importantes para lograr que votaran los grupos de edad más jóvenes y mayores. Los talleres de ideas al aire libre han sido muy populares. De media el número de votos emitidos en el presupuesto participativo ha rondado el 10% de los vecinos.
Las evaluaciones intermedias muestran que los proyectos han sido bien recibidos, que los ciudadanos son positivos hacia el proceso y que los grupos de trabajo locales han tenido influencia y moldeado el proceso a las condiciones locales.
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